Todo depende del uso y el presupuesto, pero en general nosotros como expertos en cerámica, los platos de este tipo serían nuestra primera opción. No ya por el hecho de trabajar con este material y conocerlo de primera, sino porque a lo largo de los años hemos visto como evoluciona este material y como muchos clientes que probaron otros tipos vuelven a la cerámica.
Los tipos de platos de ducha de cerámica son resistentes, brillan por el esmaltado que además los mantienen en condiciones muy buenas por mucho tiempo y además se pueden arreglar pequeños rayones del esmaltado que surjan del uso diario sin mucho problema.
Sin embargo, otros materiales, como los de carga mineral o las resinas, pueden envejecer no tan bien y que con el paso de los años se note que ya no está en su mejor momento. Las resinas además se rayan bastante fácil. Esto quiere decir que si vas a colocar un plato de este tipo en un baño con mucho uso, terminarás cambiando el plato en no mucho tiempo, porque se quedará con un aspecto feo mucho antes que el cerámico.
Otros materiales como la piedra o la pizarra son también muy bonitos y resistentes, e incluso los baños de obra que tan de moda se han puesto últimamente, pero, sin embargo, a nivel de precio son bastante más caros que los platos de ducha cerámicos y esa es otra de las cosas que nos hace decantarnos por la cerámica, el baremo calidad precio.
Comments (0)